Áridos, cosméticos, perfumes, medicamentos, carburantes, abonos, fertilizantes… Todo esto que empleamos o consumimos todos los días es fabricado con productos que necesitan una modificación en su tamaño y forma. Y para ello, se emplean los diferentes tipos de clasificación de trituradoras. Máquinas imprescindibles que nos facilitan nuestra forma de vida. ¿Quieres saber para qué sirven exactamente?
Qué es una trituradora
Una trituradora es una máquina que procesa un material, mediante uso de la fuerza, para disminuir su tamaño y ajustarlo a las necesidades de un proyecto. De esta forma, pueden obtenerse productos homogéneos y de mayor calidad que forman parte del contenido de muchos artículos que usamos cada día.
La correcta elección de la máquina trituradora es esencial para conseguir el efecto buscado. Para ello, deben estudiarse las características deseadas del producto final como su tamaño, su granulometría o su peso volumétrico.
Este tipo de máquinas son muy utilizadas en procesos agrícolas e industriales. En los primeros son utilizadas para triturar, prensar o machacar tanto hierbas como ramas y plantas con propósitos diferentes como pueden ser operaciones de limpieza, obtener diferentes productos enfocados al compostaje, en la elaboración de abonos y fertilizantes, y de diferentes productos alimentarios, cosméticos y farmacéuticos, entre otros.
Por otro lado, una trituradora industrial es capaz de machacar materiales mucho más duros como rocas o diferentes metales. Estos modelos son muy utilizados en sectores tan diferentes como la minería, la construcción o en diferentes tipos de industrias.
Clasificación de las trituradoras
La técnica de la trituración consiste en una serie de pasos que tienen el objetivo de obtener diferentes tamaños de los productos para la elaboración de nuevos materiales con fines muy distintos. La clasificación de las trituradoras se realiza en función de los volúmenes que son capaces de conseguir. Veamos cuáles son:
Trituración primaria
Las trituradoras primarias son capaces de disminuir el tamaño de los materiales a un rango comprendido entre las 6 y las 8 pulgadas. Una vez realizado este proceso, los productos se procede a un cribado para clasificarlos.
El funcionamiento de una trituradora de quijada, también llamada mandíbulas, es el ideal para esto. Estas máquinas se caracterizan por ser portátiles y por adaptarse a cualquier tipo de terrenos. Son perfectas para el tratamiento de materiales de todo tipo de durezas y realizan una trituración de proporciones muy exactas, con partículas finales muy uniformes.
Trituración secundaria
Proporcionan materiales comprendidos entre las 2 y las 3 pulgadas. Estos tamaños ya son los indicados que deben tener los áridos para ser usados en obra.
Las máquinas más utilizadas en estas fases son las trituradoras giratorias y las cónicas. Ambas se caracterizan por tener altas velocidades de giro, en torno a las 500 r.p.m. y en que tienen una abertura mucho menor que las primarias.
Trituración terciaria
También denominada molienda. El objetivo de estas máquinas es reducir el tamaño de los productos provenientes de la fase secundaria hasta obtener tamaños comprendidos entre los 1/2 y 3/8 de pulgada. Las trituradoras más empleadas en esta fase son las de impacto vertical y las de cono.
Conclusión
La diferente clasificación de las trituradoras permite obtener materiales con tamaños determinados. Esto es necesario para conseguir múltiples subproductos a partir de una materia prima inicial. Seguro que todos los días consumes o empleas algún tipo de elemento que, para su fabricación, ha sido necesaria el empleo de una máquina con estas características.